La eterna batalla

Parte II


El reinado de la tierra...
Comenzó tan obscuro como la noche
Astaroth, Luzbel, Satanás y su guerra
Hicieron de la humanidad un reproche

Entre juegos de guerra entre humanos
Las batallas se hacían entre hermanos
Comió la tierra sangre de guerra
Hombre y hembra cual perro y perra

Y el fuego en la tierra ahora es ceniza
Todo parece muerte, todo es el infierno
Se vertió el elipsis cual vil veneno
Que ensalza de Satanás la conquista

Los últimos justos fueron asesinados
Cual Dios lo hizo en Sodoma y Gomorra
Cayeron como muros, como en Jericó y ahora
Se encuentran pagando las culpas del pasado

Y brota de la tierra el errante viajero
Aquel ser maldito que mato a su hermano
Aquel que fue besado por el rayo verdadero
Aquel que odia a Dios por medio del ser humano

Se oye uno voz en el fondo del castillo
Caín…, Caín…, ven que yo te llamo
Ven aquí después del gran pasillo
Que aquí esta lilith la única que amo

Y hoy quiere estar en los juicios del Dios
Que por medio del justicia antes sus ojos
Mató, cegó, ahogó, extinguió la voz
De todo aquel que no seguía sus antojos

“Ya que clase de Dios fue ese tipo...
Que enaltece a unos y desprecia a otros”
Juega con la fe de un hombre prototipo
Y le extingue familia, sirvientes y potros

Aquel Dios que se burla del amor de padre
Y trata de obligar a un padre a matar
A su único hijo en sacrificio de tarde
¿Dónde está su mandamiento del amar?

Después de la muerta de judíos
Por un mediocre becerro de oro
Cual vanidoso de celos de un amor cual odio
Que no abarca justicia sino solo decoro

Esa voz fue callada por miles de gritos
Que pedían la cabeza de ese inhumano Dios
Todos le escupían y le gritaban maldito
Muera por injusto, vanidoso y precoz

Y la furia social de humanos mareados
Grito con fuerza que muera el maldito
Camina hacia el verdugo amarrado
Entre escupidas, maldiciones y gritos

Y colocan su cabeza en el pabellón
Y el hacha del verdugo se alzaba
Latían a mil por hora su corazón
Mientras el cielo con luces se iluminaba.